Recubrimiento interior de viviendas, mejoramiento de accesos y diversas reparaciones a viviendas realizaron jóvenes de educación superior que llegaron hasta la localidad ovallina para compartir con la comunidad.
Durante una semana 45 estudiantes provenientes de Ovalle, La Serena y Copiapó estuvieron trabajando en los hogares de cinco familias de Barraza, de forma voluntaria, para arreglar sus viviendas y así mejorar su calidad de vida.
Los jóvenes voluntarios realizaron el revestimiento interior de viviendas, mejoraron accesos con ramplas, escaleras y pasamanos, al mismo tiempo que colaboraron en la limpieza y mejoramiento de espacios exteriores.
Todas estas actividades se enmarcan en la realización de los trabajos voluntarios de invierno de las instituciones Santo Tomás, que en esta oportunidad se desarrollaron en la localidad ovallina de Barraza y contaron con el apoyo de la municipalidad, que a través de la dirección de desarrollo comunitario focalizó las labores de los voluntarios, para beneficiar a quienes más lo necesitaban.
Fue así como los estudiantes llegaron hasta la casa de Andreina Cerpa, ciudadana venezolana, residente en la comuna hace tres años. Allí, los voluntarios revistieron un par de habitaciones y construyeron una escalera para ingresar a la vivienda.
Cuando finalizaron los arreglos, Andreina dijo que estaba muy contenta porque esto “lo necesitábamos… El frío obviamente pasaba mucho y es una muy buena ayuda porque ya por lo menos los chicos no van a tener tanto frío”, al mismo tiempo, comentó que como familia no lo podían hacer por falta de recursos. “Ahorita el que está trabajando es mi esposo solamente, yo estoy sin empleo y no teníamos como la disponibilidad de hacer esas cosas”, señaló.
Otro grupo de jóvenes se dedicó a mejorar la vivienda de Silvia Egaña, una persona mayor que vive junto a su esposo. Ella se manifestó muy agradecida y emocionada al momento en que los voluntarios terminaron su labor. “Quedé muy contenta con ellos. Un siete todos los niños que vinieron para acá y los que los apoyaron igual. Ellos me hicieron hasta una escalita, un caminito para bajar, un techo porque a nosotros se nos llovía la entrada, entraba el agua a la casa cuando llovía”.
Experiencia que llena el corazón
Así describieron su experiencia como voluntarios los estudiantes que participaron en esta actividad. Maximiliano Figueroa, estudiante de Técnico en enfermería en Santo Tomás La Serena, dijo al finalizar su voluntariado, que “la verdad me da mucha alegría, pero pena a la vez, terminar los trabajos voluntarios, por el tema de pasar tiempo acá. Pero igual, mucha alegría porque sé que van a estar mejor, van a tener una mejor vida, van a dormir mejor, no van a pasar frío. Y ayudar a las personas que más lo necesitan, es algo que de verdad llena el corazón”.
En tanto, Ramón Luis Sonora estudiante de Técnico en veterinaria y producción pecuaria, de Santo Tomás Ovalle, dijo que “para mí fue una experiencia muy grata porque la gente era encantadora, agradable, muy agradecidos con nosotros en cuanto a prestarles un servicio y lo hacíamos con mucha disponibilidad. Se sintió ese rico acogimiento que hubo hacia Santo Tomás y hacia los alumnos que hacemos este voluntariado, estoy muy agradecido por esta oportunidad”.
Para Estefanía Leal, estudiante de Servicio Social de Copiapó, este fue su último voluntariado, por lo que fue muy significativo. “Me voy de vuelta a mi ciudad con un gusto muy gratificante, mucha felicidad, mucha nostalgia, ya que es mi último voluntariado, pero sí se pudo realizar ese trabajo, las distintas sedes y los estudiantes pudimos hacer un buen trabajo en equipo, nos relacionamos y generamos vínculos muy fuertes. Puedo decir de los años que llevo haciendo voluntariado, que este fue uno de los mejores”.
Impactando en la comunidad
Por su parte, Pablo Pinto Cornejo, rector de instituciones Santo Tomás sede Ovalle, se refirió a los trabajos voluntarios diciendo que “esto muestra el impacto que hacemos con nuestras actividades sociales de voluntariado, que permiten cambiar la vida de las familias que están en Barraza, a las cuales se les mejoró el estado de sus viviendas y con eso logramos para ellos pasar un mejor invierno y para nosotros cumplir con el rol social que tiene Santo Tomás”.
A la vez, Pinto destacó el hecho de que estas acciones son un aporte a la formación profesional de los estudiantes, diciendo que estas “contribuyen en dos aspectos: primero lo valórico que es fundamental para Santo Tomás, enseñar el valor del trabajo en equipo, pero además, el valor de reunirse en conjunto para aportar, y además colabora en esta integración con la comunidad y la vinculación con el medio, y en tal sentido, en conjunto con la municipalidad de Ovalle y con los pobladores, hemos definido los casos. Esto muestra una forma de cómo se avanza en el trabajo comunitario desde la institución de educación superior”.
Por último, el alcalde de Ovalle, Jonathan Acuña, comentó que “hemos realizado un trabajo de colaboración y de alianzas, pensando principalmente en la comunidad, acá hay una situación que dice relación, con poder ir a apoyar a aquellas personas que tienen sus casas en condición un poco precarias, que necesitan algún tipo de mejora en infraestructura. Hemos visto en primer lugar, como los jóvenes tienen esas ganas de poder aportar a la sociedad, sobre todo en nuestros sectores rurales. Es super relevante el trabajo y la prioridad que nosotros como gestión, también le estamos dando hoy día a lo que ocurre en nuestra ruralidad, con nuestra amplia diversidad geográfica”.
Como parte de los trabajos voluntarios se realizó además una feria de servicios en la sede social de Barraza Bajo, en la que participaron las carreras de Técnico en Enfermería, Técnico en Veterinaria, Servicio Social, Contabilidad y Técnico en Administración, en cada uno de los stands docentes y estudiantes atendieron a los vecinos quienes pudieron llevar a sus mascotas para recibir atención veterinaria, así cómo también pudieron hacer diversas consultas.
Además de las carreras del establecimiento de educación superior, participaron oficinas municipales y servicios públicos como la OMIL, OPD, Oficina del Adulto Mayor, Chile Crece Contigo, Senda Previene, IPS, Delegación Provincial del Limarí.
Los vecinos además pudieron participar de un curso de primeros auxilios impartido por la carrera Técnico en Enfermería y un curso de cocina de la carrea Gastronomía Internacional y Tradicional Chilena.